lunes, 12 de octubre de 2015

Diversidad Sexual y DD HH: Breve análisis y ensayo





Derechos Humanos Y Diversidad Sexual.

Introducción.

            Desde tiempos antiguos que ha existido diversidad sexual. Incluso en los altos niveles de la sociedad. Recordemos que el emperador Caligvla se caracterizaba por tener orgías donde se incluían jóvenes de ambos sexos los que tenían, tanto relaciones heterosexuales como homosexuales.
            El si se respetaron sus derechos humanos es una incógnita, pues el sistema de gobernación que se tenía era muy diferente, y si bien existen pruebas que existían declaraciones similares, el cumplimiento de ellas quedaba a conciencia de él o los gobernantes y no era una cuestión obligatoria.
            ¿Es la diversidad motivo suficiente para discriminar, humillar y hasta matar?
            ¿Por qué la humanidad toma caminos “extraños” o alejados de lo moralmente correcto?



DD. HH. EN LA DIVERSIDAD SEXUAL

            Artículo 1: Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, y deben comportarse fraternalmente los unos con los otros (Declaración Universal de los Derechos Humanos). Nadie elige nacer con su tipo de sexo, y la ciencia ha demostrado que desde el tercer mes de gestación comienza a definirse el sexo de una persona, no así la sexualidad, que puede verse afectada por diversos motivos, ya sea internos o externos, y nos referimos a internos porque por causas desconocidas, al momento de iniciar su exploración sexual, el adolecente puede experimentar deseos o actitudes que no estén acorde a su género sexual, lo que en algunos círculos sociales no está bien visto y es incluso repudiado, y es en estos círculos en donde comienza una violación hacia el primer derecho de aquellas personas que no responden a su género sexual, si no que a una actitud sexual.
            Independiente de la inclinación, el respeto es un asunto fundamental, porque forma la base del comportamiento y define a la persona en varios aspectos sociales, por lo que podemos encontrar en la sociedad personas homofobas que no son necesariamente agresivas, lo que los convierte en personas que sólo rechazan la homosexualidad, pero también tenemos aquellas personas que no conformes con el rechazo, son altamente agresivas, llegando incluso al asesinato de personas con sexualidad distinta, lo que es una traducción de su temor hacia aquellas personas homosexuales, canalizado en agresividad. Recordemos que el término “fobia” significa temor o miedo, y el término fobia a la homosexualidad fue utilizado por primera vez allá por 1971, por George Weinberg durante una charla a un grupo homófilo (personas que mantienen relaciones con personas del mismo sexo)
            Normalmente se relaciona al homosexual (sea hombre con hombre o mujer con mujer) con la sodomía que, no necesariamente, es el acto sexual anal, sino toda aquella relación sexual no destinada a la procreación, y éste término, “sodomita”, fue utilizado durante prácticamente toda la historia hasta el siglo XIX, y hacía referencia a las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo.
            Podemos observar que, actualmente, existe la homosexualidad dentro de la iglesia, pero que, extrañamente, la iglesia se opone a este comportamiento, pues fundamentalmente, atenta contra la familia, ya que la forma normal, la vía normal de creación de la familia es a través de la relación hombre – mujer, los que procrean de forma natural a través del acto sexual. La familia es la base de toda sociedad y en este aspecto es donde las parejas homosexuales no tendrían cabida, según un gran porcentaje de la iglesia. Aquí se nos presenta claramente cierta violación de la iglesia ante la igualdad de derechos del hombre (como especie, no como género), principalmente basándose en los versículos 26, 27 y 28 del Génesis de la Santa Biblia, en donde se indica claramente que Dios creó al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza, y que fueran fecundos y fructificaran. Este es un punto bastante específico dentro de la historia de la humanidad, según las creencias religiosas den donde el mundo debería tener 4000 años y que fue creado por un poder supremo y en donde la evolución, según Darwin, no tiene cabida. Hombre y mujer fueron creados. Entonces, ¿en qué momento la humanidad comenzó a cambiar de mentalidad y de tendencia sexual, siendo que se creó hombre y mujer? He aquí un vacío inexplicable, puesto que después de que fueran expulsados, Adán y Eva tuvieron dos hijos, y uno de ellos asesinó al otro, y éste salió al mundo y encontró más gente. ¿Cómo, si el mundo apenas tenía unos 20 años, pudo haber cantidad de personas que fácilmente se contaban ya en generaciones? Ya en el versículo 14 del Génesis Caín habla del miedo a la demás gente, acusando lo propuesto.
            Obviamente, la iglesia ha entrado en contradicción desde el principio, imponiendo sus ideologías y leyes religiosas, amenazando con los peores castigos o la negación del reino de los cielos por tales o cuales pecados (incluyendo lujuria <luxus = abundancia>, pero en este caso acusando el deseo incontrolable y desordenado por el sexo), pecados capitales que ni siquiera aparecen originalmente en la Biblia, sino que son, a mi parecer, la base para formar sociedades ordenadas.

            Artículo 7: Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que infrinja esta declaración (DUDH) y contra toda provocación a tal discriminación. (Declaración Universal de los Derechos humanos). A pesar de estar establecido en la DUDH, cada día hay actos de discriminación hacia aquellas personas con inclinación sexual distinta a su género, ya sea por grupos minoritarios o grandes grupos de sociedades, y entre los que contamos con más frecuencia a los auto denominados grupos neo-nazis, quienes en su afán de ser una raza pura, en su ignorancia, temor, rebeldía, debilidad mental (en este punto hay que ser específico, ya que muchos integrantes se “convierten” a estos grupos porque no tienen la fuerza mental o madurez mental suficiente para pensar por sí mismos y reconocer qué está bien o mal, dejándose influenciar por masas insensibles, deseosas de ser mejores dentro de la frustración de no ser lo que desearon ser y atacan lo que sea a fin de desahogar tal frustración), insultan, discriminan, agreden, y hasta asesinan a personas con tendencias sexuales diferentes. Lamentablemente, la sociedad mayoritaria poco o nada hace respecto a esto, ya que estos grupos violentistas son, valga la redundancia, extremadamente violentos, jamás están solos, y generalmente se encuentran fuertemente armados, y en ciertos países, sobre todo en Estados Unidos, la constitución permite que cada norteamericano tenga un arma, con controles mínimos o nulos, permitiendo que estos grupos tengan acceso a las armas que luego utilizan en contra de lo que consideran diferente. Chile no está muy lejos de esta realidad. Cada día se ve cómo estos grupos amenazan la seguridad de las personas, y, reduciendo al tema tratado, a los grupos de diversidad sexual.
            El artículo 20, en el punto 1 de la DUDH protege el derecho a la asociación y reunión pacíficas, lo que da el pie para la formación de grupos humanitarios o de defensa de derechos básicos como el MOVILH en Chile, que se preocupa por los derechos básicos de las personas y/o grupos de diversidad sexual, reconocido y apoyado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Amnistía Internacional y la Oficina Regional de América del Sur del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los DD HH.
            Sin embargo, hay mucho por hacer en temas de igualdad y seguridad, ya que los gobiernos, por motivos que (me atrevo a decirlo) que sólo ellos conocen, no son capaces o creen que no tienen el poder de modificar las leyes internas, endurecer penas, imponer castigo, etc., contra actos que son claramente discriminatorios y violentos en contra de las mal denominadas “minorías sexuales”. Para muestra, un botón: en Chile, actualmente, es más castigado robar una gallina que asesinar a una persona. No importando su tendencia sexual, todo ser humano es igual en derechos y deberes, en capacidades y oportunidades, y la violación de sus derechos, por muy básicos que sean, deben ser protegidos y respetados por la sociedad y el gobierno. Las escusas sobran cuando se quiere hacer vista gorda ante tal o cual injusticia, incapacidad o incompentencia ante asuntos que no afectan sólo a un grupo, sino a toda la sociedad.



Conclusión.

            No ha sido fácil elaborar este breve ensayo respecto a un tema tan delicado, puesto que mi postura ante la diversidad sexual no era la más apta para analizar desde un punto neutro.
            Desde hace muchos años que he tenido rechazo ante la diversidad sexual, a lo que me consideraba homofóbico, pero al avanzar en el tema, profundizar, leer, buscar y estudiar, y por sobre todo, analizar mi postura y comportamiento ante el tema, logro dilucidar que es sólo un mero rechazo, y que si bien mis bases tienen algo de peso, no son lo suficiente como para ser una persona que sea capaz de discriminar a otras sólo por el hecho de ser diferentes.
            Todos somos ignorantes, y sólo el estudio en profundidad, el no ser arbitrario, puede ayudar a esclarecer nuestra posición ante la sociedad y ante uno mismo. La ignorancia sólo lleva a decisiones y acciones egoístas y estúpidas que ni un bien hacen y sólo nos dejan mal puestos ante el mundo.
            Si. Tengo claro que las relaciones homosexuales son antinaturales, pues entre personas del mismo sexo no se puede procrear, pero no es razón para negarles el derecho a ser. A tener una familia, una identidad, una postura ante la sociedad o el país.

            La historia está llena de inequidades y contrariedades. Llena de actos barbáricos guiados por el miedo y la ignorancia. Lamentablemente, el día en que esto no ocurra está lejos, pues siempre habrá quien piense diferente y que por razón o fuerza quiera imponer su ideología.